Las palabras emitidas por el Secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, cuando propuso la expulsión inmediata de los delincuentes extranjeros, parecen haber sido la punta del iceberg de una escalada xenófoba que parte, aunque parezca insólito, de los propios funcionarios de gobierno, como sucedió hace algunas semanas con el intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto.
Daniel Evangelista es también secretario de Seguridad, pero de la localidad de General Rodríguez, en la provincia de Buenos Aires. Los vecinos buscaban respuestas desde las autoridades municipales y policiales ante la reiteración de hechos delictivos en los barrios, por eso participaron de una reunión con los funcionarios responsables, en la Cámara Empresaria de esa localidad. Pero lejos de desplegar su capacidad para resolver los problemas de la gente, Evangelista no tuvo mejor idea que echarle la culpa de todos los males a "los bolivianos, paraguayos y peruanos".
"Me tienen las bolas llenas. Se maman, les faltan el respeto a nuestras mujeres, juegan por plata y atacan a la gente nuestra. Me tienen podrido y si me quieren tratar de xenofóbico (sic) háganlo", dijo, dejando en evidencia que no está a la altura de su responsabilidad.
El secretario de Seguridad presentó la renuncia al cargo, pero por ahora sigue en funciones. Esta mañana, pidió "disculpas" a "la gente trabajadora" de los tres países a los que hizo referencia. "A los trabajadores, no a los que vienen a delinquir, a traer violencia de género y narcotráfico", aclaró en diálogo con el canal A24.
"Estábamos en una reunión muy acalorada. Realmente en nuestro distrito tenemos una compulsa que no podemos conjugar en lo que son extranjeros con nuestra sociedad. Estábamos discutiendo la situación de ocupaciones de terreno, violencia de género, mucho alcohol en las tardes, música alta que molesta a los vecinos, en ese contexto yo realmente me sulfuré, dije una frase que no fue de ninguna manera ofensiva para toda la sociedad, sino para ese sector", manifestó tratando de justificarse.
Sin embargo, durante la entrevista telefónica reconoció que entre los delincuentes también hay argentinos, y pidió que no lo "saquen de contexto" porque "en ese momento estaba hablando de los extranjeros".
En el encuentro, vecinos y comerciantes de General Rodríguez se quejaron por el aumento de la inseguridad en el distrito. Según informó el semanario zonal El Vecinal, las afirmaciones de Evangelista surgieron por la queja de un comerciante contra "los paraguayos que roban constantemente" y generaron un escándalo en la reunión con acusaciones cruzadas, como la que le formuló el concejal Darío Kubar, quien tildó al funcionario de "discriminador". Pero Evangelista mantuvo su postura y agregó que puede demostrar sus acusaciones porque los extranjeros "son la mayoría de los que usurpan terrenos".
Para Evangelista, hay dos tipos de personas, las que son como él, y las otras. "Yo quiero a mi gente, yo no discrimino, hay mucha gente de laburo, pero la mayoría de las denuncias que recibimos son de hechos delictivos causados por gente de ese origen y esto pasa todos los días", señaló el funcionario, que responde al intendente kirchnerista Juan Pablo Anghileri.
Junto a Evangelista se encontraban el presidente de la Cámara Empresarial de General Rodríguez, Ricardo Nisi, el comisario jefe de la distrital, Daniel Ibarra, el director del Centro de Monitoreo del municipio (COM), Martín Marándola, el comisario a cargo del Comando de Prevención Comunitario (CPC), Bonifacio Ayala y el subcomisario a cargo de la seccional primera del distrito, Rubén González.