El samurái cordobés: “Mi vida era aburrida, pero quiero recuperarla”

El hombre que se defendió de un robo con una katana y que fue noticia por eso en todo el país, asegura que vivió unos “días terribles”. “Yo no soy un asesino, quería es que se fueran de mi casa y lo único que hice fue defenderme. Yo no soy Dios para andar tomando vidas”, sostuvo.



Así quedaron los ladrones.

DESDE EL EPISODIO VIOLENTO, VIVE CON CUSTODIA



¿Quién no soñó alguna vez con ser protagonista de una historia extraordinaria? Seguramente le pase a mucha gente, sin embargo, salir de lo cotiadiano, de lo rutinario, puede ser difícil. Al menos lo es para el samurái cordobés, quien, con unas sentidas palabras, lamentó el brutal episodio. 

“Mi vida era medio aburrida, pero era mi vida, y quiero volver a tenerla... Soy un tipo tan común”, planteó el hombre que se defendió de un robo con una katana y que fue noticia en todo el país. Ahora, recibe custodia y asegura que “fue uno de los días más terribles” de su vida.

Mientras para muchos puede ser considerado un héroe, Alejandro, obrero metalúrgico, no está tan convencido de ese mote y tampoco disfruta a pleno de la fama que cobró aquel 10 de abril, cuando intentaron asaltarlo mientras dormía junto a su mujer. “¿Se puede vivir con miedo?, es muy difícil. He tenido que cambiar un montón de hábitos, y la seguridad en mi casa”, reveló. 

“Me causa algo de gracia el apodo, todos en mi laburo y los que me ven me dicen: ‘Este es el samurái’”, contó con simpleza este cordobés de 49 años en declaraciones al programa La Primera Mañana de FM 97.9.

Alejandro, quien no sabe artes marciales pero admite ser fan de la cultura japonesa, contó que considera un “tesoro” a sus katanas (tradicional sable japonés) y que iniciará los “trámites para recuperarlas", ya que las tiene la Justicia, que lo sobreseyó al considerar que actuó en legítima defensa.

“Quiero responderle a mucha gente que preguntó por qué yo no los maté. Yo no soy un asesino y lo único que yo quería es que se fueran de mi casa”, manifestó en su descargo. Y cerró: “Lo único que hice fue defenderme... Soy un respetuoso de la vida... Yo no soy Dios para andar tomando vidas”.