Lo llamativo fue que mientras una de las jóvenes acuciaba verborragicamente a la otra,nadie las separo al momento en el cual una de ellas comenzó trenzarse en arrebatada violencia sobre la otra.
Se pudo observar la presencia de uniformados que tan solo miraban el triste espectáculo .
Sera que ya se instalo en la mente policíaca el hecho de no meterse ,para que? si después cumpliendo a rajatabla el estatuto policial un uniformado termina siendo el victimario en manos de jueces que miran hacia otro lado de la sociedad.