“Es un año de aprendizaje. Yo era parte de la gestión anterior pero ocupaba un rol distinto y había muchas cosas de la dinámica municipal que tuve que ir conociendo y aprendiendo. Así que fue un año de ir conociendo de la gestión, el manejo de las relaciones políticas y haciendo cambios”, evaluó el intendente de Río Grande, Gustavo Melella. “Fue un año bueno, pero muy complicado”, expuso.
Uno va descubriendo que en Tierra del Fuego hay mucha dinámica en la política, entre distintas instituciones, entre sectores económicos, empresariales, sindicales. Y hay un entramado que es natural con el cual a veces uno no está de acuerdo y en otras sí. Y uno debe aprender a moverse en ese ámbito, algo que cuesta mucho y es duro. Pero nuestra decisión política es el diálogo y el consenso, sin resignar valores y principios, pero tratando de transformar las relaciones políticas”, destacó.
Consideró que “fue un año bueno, pero muy complicado. En términos personales e institucionales terminé marcando una diferencia con el Superior Tribunal de Justicia, con algunos sectores de la política y hasta económicos que se relacionan mucho. Y esto debe ir cambiando, todos debemos entender que el bien común está sobre el bien corporativo o personal”.
Incluso mencionó que “varias veces he sido muy crítico con la Cámara de Comercio con respecto al aumento de precios, porque por las dudas aumentaban cuando se discutía la tarifaria. También fui crítico porque no miran a los productores y emprendedores locales que se ganan la vida trabajando, sacrificándose. He sido crítico con que los precios de los alquileres son altísimos y no se corresponden con el servicio que brindan. Y desde el Estado debemos responder en lograr obtener más tierras, y es una decisión política fuerte para el año próximo. Pero hay un abuso en los precios que cobran. El que hace esto no tiene ningún sentido de pertenencia con la ciudad, no son solidarios”.
De todos modos, reiteró que “voy a seguir teniendo una postura de diálogo con las instituciones, el Gobierno provincial, el Concejo Deliberante”.
Además, destacó el avance en materia de diálogo político, ejemplificando que “si el hospital de RG no funciona, no le deja de funcionar a Fabiana Ríos o Gustavo Melella, sino a los vecinos. Y hemos entendido que debemos acompañar con fondos para resolver el problema de Salud en la ciudad”.
Respecto de 2013, el Intendente consideró que “es un año en el que hay que ser muy cauto y optimizar los recursos. Hay empresas que han accedido a bajar los costos y otras que no, que prefieren seguir cobrando. Debemos ser muy cuidadosos en la manera que gastamos y muy claros en el manejo de los fondos públicos”.
“Deseo que sea un año de paz, donde recuperemos la esperanza, donde empecemos a querer más la ciudad. Que las cuestiones ideológicas o las diferencias que cada uno no sean motivos para distanciarnos o pelearnos, sino que sirva para construir mas la ciudad y no destruirla”, concluyó.