| El intendente Gustavo Melella se defendió esta mañana de las acusaciones de distintos sectores por cierta debilidad en el reclamo de los fondos que corresponden a la ciudad, en función de su buena relación con el gobierno fueguino. Sin embargo admitió que hubo un “distanciamiento”, si bien considera que se debe mantener la relación institucional, aunque su forma de reclamar se mantendrá dentro de los carriles legales.
“Me causó un malestar fuerte esta forma de tratar el tema, sobre todo en un ámbito como la Legislatura. Me parece que no corresponde y estas cosas no se tienen que dar, se tienen que solucionar. Algunos parecen especialistas en el chicaneo mediático y estas cuestiones no contribuyen para nada”, insistió.
Pese al giro que se dio tras la exposición pública de esta situación, la relación no es la misma. “La buena relación institucional creo que hay que mantenerla siempre, porque no corresponde no tenerla, pero uno cambia de actitud en cuanto la actitud del otro no es la misma. Esto es cierto. Si el otro no te trata con respeto, ya no es la misma relación, y es la realidad. Uno pone un distanciamiento de la situación, de los funcionarios, o del acontecimiento que se da, porque el otro no responde de la misma manera”, señaló el intendente.
Reiteró que “la relación institucional tiene que estar siempre porque, más allá de que uno quiera o no quiera al intendente o la gobernadora, la gente necesita que trabajemos y demos respuesta. Pero a veces se resiente, porque no es lo mismo volverse a sentar con ese mismo funcionario”, expresó.
Mientras se observa cierta distancia entre Ríos y Melella, ayer se dio un acercamiento con Sciurano y la decisión de unificar el reclamo por los fondos que adeuda el gobierno a las dos ciudades. “Yo no soy amigo, ni como con ella, y la relación buena tenemos que mantenerla siempre, pero lo cortés no quita lo valiente, y que uno tenga que hacer lo que tienen que hacer como funcionario público para resolver estos problemas”, dijo sobre un reclamo que se va a reforzar.
“La situación es grave por la situación financiera. Si te deben 80 millones de pesos, la situación es más que complicada y tiene que ver con esta demora de los fondos de coparticipación. Ayer lo charlamos con Federico Sciurano y en Ushuaia pasa exactamente lo mismo. Esto es frenar el plan de obra pública, las acciones de gobierno, pensar en ajustes del gasto hacia adentro. Desde el Ejecutivo municipal estamos tomando todas las medidas del caso y lo mismo va a hacer el Concejo hacia adentro”, aseguró.
Consultado acerca de la respuesta de la gobernadora cuando le habló de la deuda, respondió que fue la misma de siempre, que no hay dinero, pero lo puso en duda a partir de datos que hablan de un aumento de recaudación e ingresos. “La gobernadora entiende la situación, le hemos pedido que esto se resuelva ya, y ella explica que la situación de la provincia es complicada y que no tiene recursos. Nosotros creemos que ha habido un incremento en los recursos, es una realidad y está confirmado”, subrayó Melella, por lo cual adelantó que “buscaremos la manera de que se nos pague, sea a través de fondos de la soja o con otra forma de pago. Lo importante es resolver el día a día, el envío de los fondos de coparticipación, que es lo que complica a todos”.
El intendente dio cuenta de “instancias judiciales de antemano”, de una deuda consolidada de diez millones “que el gobierno empezó a pagar”, pero insistió en que “lo que hay que resolver es la demora en los envíos de coparticipación”.
Cargó contra los funcionarios de Ríos que dicen que no es deuda sino “demora”, pero “mandan la plata 45 días después”.
Indicó que esta demora se ha ido incrementando y “que no se reconoce como deuda sino como demora en los envíos. Es parte de una especulación judicial o administrativa, porque la realidad es que esa demora conforma una deuda que complica el funcionamiento de los municipios”, fustigó.
Contra sus detractores que marcan cierta tibieza en el reclamo, replicó que “nosotros defendemos los fondos. Si defender los fondos es ir a prender fuego la Casa de Gobierno, no es nuestro estilo ni corresponde. Se defienden los fondos dentro del marco de la ley y lo hemos hecho con firmeza”.
Además, planteó que una defensa más virulenta tampoco dio resultado: “Todos hemos defendido los fondos de distinta manera. Federico Sciurano en Ushuaia durante un tiempo tuvo una postura muy crítica y muy combativa, y estamos en la misma situación”, comparó.
“Cada vez que tenemos que reclamar, lo hacemos con la firmeza que corresponde y no vamos a hacer nada fuera del acuerdo y de la justicia. Hay sentencias judiciales que el gobierno no cumplió. Permanentemente estamos llamando al gobierno y hay funcionarios enojados con nosotros porque hemos reclamado que paguen la deuda. Lo hacemos de todas las maneras, dentro de la paz social”, remarcó.
También puso en duda la efectividad de recurrir a la justicia: “Si yo le hago una denuncia penal a la gobernadora, ya sabemos todos el tema de la justicia. Hay que hacer medidas que tengan un buen fin. Yo no quiero que vaya presa, ni que la destituyan. Quiero que los fondos de Río Grande lleguen a Río Grande y haremos todas las medidas, siempre que logremos algo. Si no se han cumplido sentencias judiciales, uno a veces se agota”, se excusó.
Respecto de las advertencias del contador José Labrocca, integrante del Tribunal de Cuentas municipal, sobre problemas inminentes para el pago de sueldos de persistir la situación, dijo que “es una opinión del contador y a mí no me preocupa no pagar los sueldos nada más, sino no poder hacer las obras de Río Grande. El día que no se puedan pagar sueldos, va a estallar la provincia”, sentencio.
SUR 54
Pese al giro que se dio tras la exposición pública de esta situación, la relación no es la misma. “La buena relación institucional creo que hay que mantenerla siempre, porque no corresponde no tenerla, pero uno cambia de actitud en cuanto la actitud del otro no es la misma. Esto es cierto. Si el otro no te trata con respeto, ya no es la misma relación, y es la realidad. Uno pone un distanciamiento de la situación, de los funcionarios, o del acontecimiento que se da, porque el otro no responde de la misma manera”, señaló el intendente.
Reiteró que “la relación institucional tiene que estar siempre porque, más allá de que uno quiera o no quiera al intendente o la gobernadora, la gente necesita que trabajemos y demos respuesta. Pero a veces se resiente, porque no es lo mismo volverse a sentar con ese mismo funcionario”, expresó.
Mientras se observa cierta distancia entre Ríos y Melella, ayer se dio un acercamiento con Sciurano y la decisión de unificar el reclamo por los fondos que adeuda el gobierno a las dos ciudades. “Yo no soy amigo, ni como con ella, y la relación buena tenemos que mantenerla siempre, pero lo cortés no quita lo valiente, y que uno tenga que hacer lo que tienen que hacer como funcionario público para resolver estos problemas”, dijo sobre un reclamo que se va a reforzar.
“La situación es grave por la situación financiera. Si te deben 80 millones de pesos, la situación es más que complicada y tiene que ver con esta demora de los fondos de coparticipación. Ayer lo charlamos con Federico Sciurano y en Ushuaia pasa exactamente lo mismo. Esto es frenar el plan de obra pública, las acciones de gobierno, pensar en ajustes del gasto hacia adentro. Desde el Ejecutivo municipal estamos tomando todas las medidas del caso y lo mismo va a hacer el Concejo hacia adentro”, aseguró.
Consultado acerca de la respuesta de la gobernadora cuando le habló de la deuda, respondió que fue la misma de siempre, que no hay dinero, pero lo puso en duda a partir de datos que hablan de un aumento de recaudación e ingresos. “La gobernadora entiende la situación, le hemos pedido que esto se resuelva ya, y ella explica que la situación de la provincia es complicada y que no tiene recursos. Nosotros creemos que ha habido un incremento en los recursos, es una realidad y está confirmado”, subrayó Melella, por lo cual adelantó que “buscaremos la manera de que se nos pague, sea a través de fondos de la soja o con otra forma de pago. Lo importante es resolver el día a día, el envío de los fondos de coparticipación, que es lo que complica a todos”.
El intendente dio cuenta de “instancias judiciales de antemano”, de una deuda consolidada de diez millones “que el gobierno empezó a pagar”, pero insistió en que “lo que hay que resolver es la demora en los envíos de coparticipación”.
Cargó contra los funcionarios de Ríos que dicen que no es deuda sino “demora”, pero “mandan la plata 45 días después”.
Indicó que esta demora se ha ido incrementando y “que no se reconoce como deuda sino como demora en los envíos. Es parte de una especulación judicial o administrativa, porque la realidad es que esa demora conforma una deuda que complica el funcionamiento de los municipios”, fustigó.
Contra sus detractores que marcan cierta tibieza en el reclamo, replicó que “nosotros defendemos los fondos. Si defender los fondos es ir a prender fuego la Casa de Gobierno, no es nuestro estilo ni corresponde. Se defienden los fondos dentro del marco de la ley y lo hemos hecho con firmeza”.
Además, planteó que una defensa más virulenta tampoco dio resultado: “Todos hemos defendido los fondos de distinta manera. Federico Sciurano en Ushuaia durante un tiempo tuvo una postura muy crítica y muy combativa, y estamos en la misma situación”, comparó.
“Cada vez que tenemos que reclamar, lo hacemos con la firmeza que corresponde y no vamos a hacer nada fuera del acuerdo y de la justicia. Hay sentencias judiciales que el gobierno no cumplió. Permanentemente estamos llamando al gobierno y hay funcionarios enojados con nosotros porque hemos reclamado que paguen la deuda. Lo hacemos de todas las maneras, dentro de la paz social”, remarcó.
También puso en duda la efectividad de recurrir a la justicia: “Si yo le hago una denuncia penal a la gobernadora, ya sabemos todos el tema de la justicia. Hay que hacer medidas que tengan un buen fin. Yo no quiero que vaya presa, ni que la destituyan. Quiero que los fondos de Río Grande lleguen a Río Grande y haremos todas las medidas, siempre que logremos algo. Si no se han cumplido sentencias judiciales, uno a veces se agota”, se excusó.
Respecto de las advertencias del contador José Labrocca, integrante del Tribunal de Cuentas municipal, sobre problemas inminentes para el pago de sueldos de persistir la situación, dijo que “es una opinión del contador y a mí no me preocupa no pagar los sueldos nada más, sino no poder hacer las obras de Río Grande. El día que no se puedan pagar sueldos, va a estallar la provincia”, sentencio.
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