La Comisión de Protección
Ciudadana mantuvo una reunión para avanzar sobre una problemática recurrente en
los últimos tiempos y que están relacionadas con fiestas clandestinas en la que
asisten menores y donde se ha detectado alcohol. Asimismo, esta comisión ha
destinado recursos para la compra de reactivos para la detección de
estupefacientes.
El encuentro fue encabezado por
el secretario de Gobierno del municipio de Río Grande, contador Paulino Rossi y
el secretario de Seguridad de la provincia, Daniel Facio, reunión de la que
tomaron parte también el subsecretario de Gestión Ciudadana, Julio Del Barrio y
el Director General de Inspección General del Municipio, José Díaz, entre otros
funcionarios.
“Hace un tiempo importante que
venimos trabajando en conjunto y esta lógica de trabajo que marca políticas
transversales que tiene que ver con garantizar la seguridad de los vecinos de
la ciudad y sobre todo tratar de proteger a los grupos más vulnerables como son
los menores de edad”, introdujo el secretario Paulino Rossi.
El funcionario municipal añadió
en este sentido que “estamos articulando distintos mecanismos en los controles
de fin de semana porque vemos prácticas recurrentes que se están dando, no
solamente en el control del tránsito, sino también esta nueva tendencia de
fiestas clandestinas donde hay menores y alcohol y con el riesgo que esto
implica para la seguridad de los chicos que van a estos lugares y también con
el entorno, ya que cuando uno va a estos lugares que no están regulados,
obviamente es sumar riesgos ”.
El contador Paulino Rossi expuso
que “cuando hablamos de políticas de prevención en lo que tiene que ver con las
adicciones, hemos tenido resultados excelentes gracias al trabajo de la Policía
provincial en conjunto con la justicia; nosotros como municipio también
queremos colaborar en el rol que nos corresponde, viendo por ahí estas facetas
que tienen que ver con estas fiestas que si hay alcohol de manera muy
accesible, también puede haber acceso a otras cosas por lo cual debemos
trabajar de manera articulada, conjunta; que la información fluya entre las
distintas instituciones”.
También, el integrante del
Gabinete municipal pide el compromiso a la comunidad “porque si hay una fiesta
con alcohol y hay menores, hay un padre que no está controlando lo suficiente
dónde está yendo su hijo. Entonces necesitamos de esta colaboración; si bien
sabemos que no es fácil en una casa donde hay adolescentes, pero ante cualquier
situación de riesgo o situación extraña que note en la familia o en los
vecinos, que se informe a través del 101 (teléfono de emergencias de la
Policía) o a través de la municipalidad porque esto nos va a permitir llegar en
tiempo y forma y no hacerlo cuando hay un hecho consumado lamentable”.
Rossi observó que “la moral de
las fuerzas de seguridad había quedado muy baja luego de que se hicieron
operativos muy grandes y luego por errores formales o de procedimientos se
pierde el trabajo de mucho tiempo, realmente golpea un poco en el ánimo. Pero
con la conciencia tranquila de que ya con el hecho de sacar del mercado una
cantidad importante de estupefacientes, ya se logra el objetivo y en esta
lógica de trabajo de ser proactivos, de no desanimarse, nosotros queremos
brindar todo el acompañamiento y no solamente el acompañamiento político, sino
también con acciones en el quehacer diario, con los fondos necesarios de la
comisión de seguridad (la Comisión de Protección Ciudadana) y ver de qué manera
podemos ayudar a que este trabajo sea más eficiente”.
Rossi apeló a que “la comunidad
sepa que hay un sector que sin importar a qué institución le corresponda, no
eludimos responsabilidades, sino todo lo contrario, tenemos políticas
proactivas para garantizar la seguridad de una ciudad que está creciendo y este
crecimiento está trayendo problemas nuevos y nosotros como funcionarios tenemos
que estar a la altura de estos nuevos problemas que tenemos hoy dentro de la
comunidad”.
Consultado si el municipio o la
policía lleva un registro sobre estos lugares de reunión de menores, Rossi
observó que “no podemos caer en la vieja frase de cazar en el zoológico; es
decir, solamente controlar lo que está habilitado –lo que efectivamente se
hace- sino también detectar otros lugares que se prestan para estas reuniones y
que no están registrados ni habilitados, como nos pasó con los albergues, donde
había casas aparentemente de familias, pero en el fondo, en la parte posterior,
se utilizaban como hospedajes, cobrando precios altísimos y sin garantizar la
más mínima seguridad de la gente que alquilaba una cama”.
“Esta realidad que lo vemos con
los hospedajes, se está viendo de manera recurrente con estas fiestas no
autorizadas, por eso no solamente controlamos lo que está dentro de nuestros
registros, sino también lo que se manifiesta como un movimiento evidente y sin
las habilitaciones del caso”, concluyó Rossi.
En tanto el licenciado Daniel
Facio destacó que el rol de la provincia es múltiple en esta problemática. “En
principio, lo hacemos con la seguridad que es lo que corresponde, en
articulación con la fuerza que tiene competencia en la seguridad pública, la
Policía de la Provincia, y en principio también con la Unidad Preventora de
Minoridad y Familia, que funciona en INTEVU”.
Agregó que “esta comisaría sí
funciona y está a cargo de la problemática con los menores en conflicto con la
ley. Esta unidad está a cargo de diligenciar y/o dirigir y gestionar en este
caso los conflictos de los menores con la ley”, remarcó.
Sobre las fiestas que se
realizan durante los fines de semana, “que son reuniones que se llevan adelante
de manera clandestina, conllevan otras circunstancias que tratamos de evitar y
a partir de hacer un llamado a la comunidad, a los padres, de que estén atentos
porque en estos lugares si hay una venta de alcohol indiscriminada, también
conllevan otras cuestiones que son bastante más peligrosas, entonces tenemos
que estar alertas como papás y como sociedad”.
El Secretario de Seguridad de la
provincia añadió que “como funcionarios somos parte de la sociedad y nos toca
sí brindar la seguridad que corresponde, pero también creemos que debemos
hacerlo desde la célula más chiquita que es la familia”.
“Partiendo de esta base, todos
podemos comprometernos a aportar para vivir en un lugar mucho más seguro”,
apeló finalmente.