Obras Sanitarias
Debido a la falta de agua en la ciudad de Río Grande, se
recomienda a la población extremar el uso del vital líquido elemento. Recuerdan
que está prohibido el uso de hidrolavadoras, bombas conectadas a las redes
sanitarias y asimismo mangueras de riego con uso prolongado. En la próxima
semana habrá un corte de agua en toda la ciudad por el cambio de un manifold en
la planta de ‘El Tropezón’, hecho que se comunicará con la suficiente
antelación a la población.
El Municipio de Río Grande, a través de la Dirección General de
Obras Sanitarias dependiente de la Secretaría de Gobierno, recomienda a la
población racionalizar el uso del agua potable.
El titular de la repartición municipal, Oscar Peralta, admitió al
respecto que “tenemos algunos inconvenientes con la provisión del agua en
algunas zonas de la Margen Sur, especialmente en las chacras, todo esto es
debido a que durante la noche, estamos bajando las presiones para recuperar
niveles, después distribuir durante el día, desde las cisternas y durante el
día también tenemos en horarios pico, en almuerzos y cena donde la gente -en su
mayoría- hace uso del agua y las presiones se ven afectadas”.
El funcionario municipal exhortó a la población a que “por favor
en estos días lindos cuiden el agua, especialmente con el lavado de los
vehículos y con el tema de regados. Hay ordenanzas que prohíben expresamente el
derroche del agua y nosotros con los inspectores estamos reforzando los
controles y estamos labrando las actas respectivas por estas situaciones”.
El Director General de Obras Sanitarias recomendó al margen de
estas medidas de que la población “cuide el agua” y recordó sobre el lavado de
vehículos que “hay que hacer como los taxistas, lavar con un tacho de agua,
todo lo que es hidrolavadoras, mangueras y bombas en la red está totalmente
prohibido. Se han detectado casos, que los propios vecinos han denunciado,
sobre el uso indebido del agua con gente que utiliza una o dos horas el agua
potable para regar las plantas”.
Peralta destacó también que después de muchos años de desinversión
en materia de infraestructura sanitaria, la actual del profesor Gustavo Melella
ha decidido la construcción de una planta procesadora de agua potable que
triplicará la actual producción y la colocación de cuatro plantas modulares que
a corto plazo permitirá incrementar en un veinte por ciento el caudal de agua
potable. “Esto se debería haber planificado mucho antes, esta gestión se está
haciendo responsable; tenemos una gran obra que es la planta de agua potable
que tiene un plazo de aproximadamente dos años de construcción. Debido a esta
situación y ya con el problema a cuestas, estamos con la colocación de las
plantas modulares que nos va a dar la posibilidad de producir 200 metros cúbicos
por hora, que vendrá a incrementar la capacidad de producción actual de la
planta de ‘El Tropezón’ de mil metros cúbicos por hora. Estamos hablando de un
veinte por ciento más de producción”.