El accidente que sufrieron los condenados por el triple crimen en una ruta a la altura de Cayastá y la ayuda de un vecino de esa localidad a la Policía local fueron determinantes para detener a los hermanos Lanatta y a Víctor Schillaci.
Foto: ellitoral.com
A pesar de que durante 13 días, fuerzas nacionales, bonaerenses, helicópteros y camionetas buscaron a los tres condenados por el triple crimen de General Rodríguez, el hallazgo lo protagonizó la Policía de Santa Fe y las claves para la caída de los prófugos fueron un accidente y tres caballos.
A Martín Lanatta lo detuvieron esta mañana en la zona de Cayastá, a unos 80 kilómetros al norte de la capital provincial, luego de que volcara la camioneta en la que escapaba junto con su hermano Christian y Víctor Schillaci.
La camioneta en la que se trasladaban era una Volskwagen Amarok, ploteada con inscripciones de Gendarmería. Luego del vuelco, Christian y Schillaci lograron escapar, pero Martín, herido, se trasladó hasta una casa para pedir agua, y allí lo capturó la Policía.
Al respecto, la secretaria comunal de Cayastá -en diálogo con Radio Mitre- Viviana Agusti, consideró que "se metieron por un camino transversal y volcaron con la camioneta... ahora hay plena creciente o inundación. Los campos se han inundado. Hay muchos caminos rurales que están cortados, se quedaron empantanados".
Más tarde, en el paraje Las Cuatro Bocas, a unos kilómetros de Cayastá, la Policía halló a Christian Lannata.
Sólo quedaba Víctor Schilllaci prófugo y, de acuerdo a lo contado por un vecino de la zona, fue capturado gracias a los tres caballos que él mismo le prestó al comisario de la zona.